viernes, 2 de julio de 2010

El arte de la “closetología”

desesperada1 “No-tengo-nada-que-ponerme!” es la cantaleta que una y otra vez decimos las mujeres. “Una ironía,” piensan los hombres cuando voltean a ver las montañas de ropa y zapatos que tenemos almacenadas el closet. Pero así es, son infinidad de veces las que sentimos que no hay conjunto de ropa que nos funcione ya sea para un evento en particular o un simple día de trabajo como cualquier otro. Sin importar si gastamos la mitad de nuestro sueldo en ropa y accesorios, de pronto llegamos al punto de gritar una vez más “¡No-tengo-nada-que-ponerme!”

¿Por qué somos así las mujeres? Según la asesora de modas Jackie Walker esto se debe a que no importa si tenemos un closet con la posibilidad de vestir a un pueblo entero, en realidad, todas las mujeres solo aprovechamos un 20 por ciento de la ropa que guardamos dentro del closet. En contra parte, los hombres utilizan el 90 por ciento de las prendas que tienen, es decir usan mucho más eficientemente lo que tienen en el guardarropa.

Para Walker, esta diferencia de como las mujeres y los hombres usan y se relacionan con la ropa radica en que para un hombre una corbata es eso, una corbata, la usa porque la necesita para ir al trabajo. Mientras que para las mujeres, una falda o unos zapatos implican toda una historia.

Si tu haces un cumplido a un hombre sobre su saco, él te dará las gracias y listo. Para él no es más que algo que lo cubre del frío. En cambio, si a una mujer le dices “qué lindos tus zapatos”, obtendrás una saga completa de cómo los compró, dónde, cuánto le costaron, si son cómodos o no, por qué los usa con esa falda y por qué tiene otros que son iguales pero de otro color. Esto, al final, demuestra que las mujeres reflejamos toda una psicología a través de nuestra relación con la ropa. Es por esto que Walker ha desarrollado su llamada “closetología” para comprender esta relación de las mujeres con su closet ayudando a hacerla más armoniosa, fluida y eficiente.

Para esto se recomiendan algunos pasos que te ayudan a salir de ese 20 por ciento de ropa que usas, observando y cuantificando los pasivos que hay en tu closet, para que puedas ser más eficiente en tu forma de combinar y transformar tu look de acuerdo a tus necesidades, sin gastar más y sobre todo ayudando a que al vestir te sientas tu misma. Aquí algunos de los tips del arte de la closetología:

1.- Deshacerse de todo lo que no sirve, no usas, ya no está de moda.

Hay miles de cosas que guardamos, “por si acaso” o por que “que tal que vuelve esa moda”. El consejo es: si no lo has usado en dos años, sácalo. Una forma positiva de verlo es pensar que estas haciendo espacio para cosas nuevas, que por cierto, deben ser muy combinables con lo que ya tienes.

2.- Hacer un inventario

Esto te dará un panorama de qué es con lo que cuentas (te sorprenderás de ver el verdadero potencial de tu clóset). Luego divide la ropa en cosas para trabajar, de fiesta, deportivas, fin de semana, etc. Para ver los conjuntos que puedes armar.

3.- Hacer una gráfica de actividades

En una gráfica tipo pastel, escribe los porcentajes de tus actividades en un mes. Por ejemplo si trabajas 40 horas a la semana, eso significa que trabajas 160 horas del mes, o sea el 23% del mes estás vestida para trabajo. Así debes hacerlo con todas tus actividades incluso las casuales o vacacionales: horas de ejercicio 10%, vida social 12%, en la casa de campo, en la playa, etc. Así sabrás realmente qué es lo que más usas y el inventario de tu clóset debe dividirse en porcentajes similares. Esto no sólo te ayudará a arreglar tu closet sino a saber realmente qué necesitas la próxima vez que vayas de compras.

4.- Reacomoda tu clóset.

La mejor forma de ordenar es poniendo todo por tipo de ropa es decir, pantalones con pantalones y suéteres con suéteres. Hay quienes recomiendan hacerlo por color, aunque yo para ser sincera me conformé con que no esté todo revuelto. De esta forma no sólo se verá más bonito y podrás guardar la ropa de forma que no se maltrate (por ejemplo si cuelgas tus suéteres se deformarán y harán grandes).

Una vez que haz llevado estos 4 pasos verás que efectivamente usabas siempre las mismas cosas, ahora, después de haberte deshecho de lo que no necesitas tienes más espacio para ver lo que si tienes y podrás armar diferentes conjuntos aprovechando todo lo que haz invertido en ropa.

Y tu ¿crees que realmente usas sólo el 20 por ciento de tu ropa? ¿cómo piensas que puedes aprovechar mejor el resto de tu closet?

Fuente: http://mx.mujer.yahoo.com/blog/Eugenia-Correa/215/El-arte-de-la-closetologa